En esta época, en que la psicosis por la seguridad hace que nos saltemos las libertades personales y los rayos X invaden tu intimidad, he recordado una antigua serie de comics y la he releído en estos días.
El comic-novel gráfica-obra maestra en cuestión es Watchmen, guionizado por Alan Moore (también guionista de V de Vendetta o From Hell) y dibujado por Dave Gibbons.
La frase que da nombre a esta entrada es uno de los pilares sobre la que se asienta esta serie de doce números recopilados ahora en un inmenso tomo.
La acción nos sitúa en los años 80 de una realidad alternativa en la que los Estados Unidos ganó la guerra de Vietnam y Nixon está próximo a ser reelegido presidente. En esa realidad existen unos justicieros enmascarados que nada tienen que ver con Superman, los X Men y otros superhéroes. Básicamente la serie es una reconstrucción del mito de los superhéroes, desmitificándoles y haciéndoles parecer ruines en ocasiones.
Pero eso es solo una de las láminas de la cebolla. El mérito de la obra lo tiene casi por completo el guión, que con sutiles palabras nos explica el pasado de los personajes y va abriendo diversas sub-tramas que enriquecen el universo, capas que se superponen unas sobre otras, como por ejemplo la historia sobre piratas que lee un chico al lado de un puesto de periódicos, en ocasiones tenemos en una viñeta una escena pero queda silenciada puesto que en el bocadillo de la viñeta aparece escrito lo que el chaval va leyendo, mareando a veces pero dejándote gratas sorpresas muy a menudo.
No os voy a contar mucho, no os voy a hablar del doctor Manhattan o de la Guerra Fría latente durante toda la historia, que hace que el reloj del holocausto nuclear camine inexorable hacia la hora fatal, motor de los acontecimientos que llevan al final de la obra.
Y no lo voy a hacer porque en su día quien me recomendó esta obra me dijo lo mismo que os voy a decir ahora mismo: descubridla por vosotros mismos, leer y releer sus páginas buscando las diminutas claves de las que está plagado el texto para comprender la riqueza y la perfección de la obra.
Si no os llaman la atención los comic o no podéis haceros con él, siempre queda la opción de ver la película, que salió el año pasado. Aunque es un poco más violenta en algunos puntos que su versión en papel, está muy trabajada y bien llevada a cabo, tal y como su director, Zack Snyder, hizo hace un par de años con 300. Y, eso sí, no os perdáis ni un segundo de los créditos iniciales de la película, ¡qué forma de contar tanto en tan poco tiempo!
Y si podéis, claro, leer el comic y ver la peli, je, je.
9 comentarios:
Me apunto tu recomendación, Jesús.
La verdad es que leí muchos cómics hace años, pero no Watchmen, no sé por qué, no me atraía. Ahora, leyendo tu excelente reseña se me ha abierto el apetito.
Gracias por esta entrada.
Un abrazo.
He visto la peli pero no he leído el cómic y me apetece muchísimo. A mi me gustó bastante, la historia me parece muy original.
Gracias por compartirlo, un abrazo!
Cris
Hola Sergio,
je,je, me harás sonrojar con lo de excelente. ada, cuando lo leas me comentas qué te pareció. Por cierto, Lector Constante del sr. King, ¿te has hecho ya con su último libro de relatos?
Hola Cris,
básicamente la historia es la misma, aunque en el comic hay muchas más sub-tramas y el final es diferente (tranquila, que no cuento nada).
En fin, ya me contarás si lo lees qué versión prefieres.
Un abrazo.
No me interesa ni el comic ni la peli, jeje. Pero siempre es bueno estar informad@.
¡Ja,ja,ja, qué sincera, Lola!
bueno, para gustos están los colores, ¿no?, que si no todo sería muy aburrido.
Pero que conste que te pierdes una muy buena broma, je, je.
un abrazo, compañera.
Me encantaría leer el comic, pero dudo poder encontrarlo; así que será la película.
Gracias por la recomendación :)
hola Danny, pues disfruta de la peli, ya me contarás qué te pareció (aunque si encuentras el comic lánzate de cabeza a por él).
Un abrazo.
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